Les he pedido que me dibujen como ellos me ven y que escriban mi nombre. Algunos han tenido que ir a la puerta a buscar las letras que lo componen y lo han escrito en sus trabajos.
Me hace mucha gracias ver cómo ellos me ven...
Después, entre todos , hemos construido un mural para nuestro pasillo. Ya no nos quedan casi huecos.
Os dejo un enlace a una noticia que me ha gustado mucho y quiero compartir con vosotros.
Siempre he querido ser maestra. Desde pequeña soñaba con poder enseñar. Me siento muy feliz y agradecida por poder trabajar a diario con vuestros hijos.
Los maestros dejan huella en el corazón de los niños. ;)
ResponderEliminar¡Y los niños en el nuestro!
ResponderEliminar